Durante la primera semana de la
crisis por Pandemia, he estado estudiando los patrones de información acerca
del virus, todos llevan a varias conclusiones interesantes, desde varias
perspectivas, las que menos nos imaginamos muchos humanos, repercutiendo
positivamente en el ambiente, en nuestro planeta y paradójicamente en bien de
nosotros mismos como especie…
Lo primero que comparto, es que
para la Tierra ha disminuido en unas semanas la contaminación global a
gran escala, solo en la misma China(quien originó todo esto) se han despejado
los cielos de la contaminación generada de tal forma que los satélites han
captado excelentemente este fenómeno…animales regresando a sus hábitat, desde
que no hay humanos cerca(si nosotros invadimos su terreno, no al revés) por
tierra y por mar…se ven los cielos más despejados desde que no hay aviones
volando, son tantas cosas que son favorables para nosotros como especie, que
deberíamos repensar lo que son nuestras actividades diarias y cómo afectamos al
resto de las especies que también habitan nuestro planeta…
Lo segundo es que encerrarnos por
una tragedia, nos da una pauta de reflexión profunda, casi meditativa a todos
los seres humanos, ¡y es obligada!
No sabemos exactamente cómo ha
pasado esto, un virus, que según muchas teorías ha surgido de seres humanos
alimentándose con cualquier otra especie, sin medir consecuencias de la
salubridad e higiene que deben llevarse, o un experimento fallido con un virus
que se hizo en laboratorio, en cualquiera de los dos casos, si es que no hay más,
es un atentado contra el resto de la humanidad, producto de un régimen
totalitario que esconde toda la verdad en su propio beneficio, y encima se cree
con derecho a reclamarnos al resto, de que no han sido ellos los culpables de
tanta tragedia… pero, y existe un pero…deberíamos dar gracias por esto, ya que
si bien el costo en vidas humanas es alto, no es menos cierto, que esto también
nos llama a la reflexión de lo vulnerables que somos como especie, a mejorar
nuestros sistemas de alarma y detección temprana de infecciones y nuestros
sistemas de salud, que tan poco apreciamos, hasta que pasa algo como
esto…quedamos desarmados ante un microorganismo, que ni siquiera tiene vida
propia, sino que aprovecha la vida de los huéspedes para sobrevivir y
mantenerse vivo, replicándose incesantemente hasta que algo lo detenga…
La reflexión también pasa por
vernos a nosotros mismos… ver nuestra misma naturaleza, lo que hemos hecho o
dejado de hacer, por nosotros mismos, por nuestras familias y por toda la
sociedad de la que formamos parte…hemos perdido el control sobre nuestras
propias vidas, hemos delegado en otros, que en muchos casos han sido muy
irresponsables, nuestra salud, nuestra alimentación, nuestro transporte, sin
hacer los reclamos necesarios, sin hacer que hagan lo que supuestamente
deberían hacer, que es liderar y gobernar la sociedad en la cual habitemos… no
haré reflexión de la política, eso no, los políticos de oficio han demostrado
fehacientemente lo ineptos que son… se trata de lo que cada Ciudadano debe
hacer, por si mismo, por su familia y por los demás…
Hemos dejado de ser ciudadanos,
nos convertimos en casi autómatas…comer, trabajar, descansar, a veces
divertirnos, a veces hablar en familia, a veces compartir con los padres, a
veces, a veces, a veces…. NO, esto no es ser un humano... no somos números,
tampoco “colaboradores o empleados” somos humanos… tenemos necesidades humanas,
necesitamos trabajar, si, pero no tantas horas que lo que uno le queda es
descansar de tanto trabajo sin sentido, el dinero manda, y las empresas son las
únicas con ganancias, lo que gana un empleado a veces ni alcanza para vivir…esa
es la realidad que he visto y oído, en todo el planeta, es igual, es la queja
mas frecuente de casi todos los seres humanos que “viven” sin un sentido o
propósito determinado por ellos mismos…
Hay que recuperar este sentido o
propósito, recuperar las ganas de hacer algo diferente, que sea útil a todos,
que promueva el bienestar y si no es lo mejor para nosotros, mantener la
búsqueda constante de lo que nos haga sentir plenos, felices con lo que
hacemos, y sobre todo ¡LIBRES!!!
Libres de elegir, de seleccionar
lo que nos convenga, conscientemente, y no solo un gusto o capricho que dure 10
segundos…
Debemos buscar nuestras propias
raíces, nuestro propio lugar en este mundo, elegir correctamente, a conciencia
lo mejor, no solo para mí, sino para todos… esta bien cierto grado de “egoísmo
responsable” pero no estamos solos, ni estamos aislados…
Es ahora cuando estamos en una
situación que nos obliga a ello, pero esto pasara, y cuando eso suceda, ¿seremos
los mismos?
Creo que esta situación nos hará
cambiar, tantos días encerrados, muchas veces solos, sin otro contacto humano,
sin nuestros padres, ni hermanos, ni pareja, sino la tenemos, nos debe hacer
cambiar de perspectiva… El coaching y la meditación me enseñaron eso, todo
cambia, nada es inmutable…
Lo principal es ver que podremos
salir de esta situación, ojalá sin mayores traumas, el planeta cada cierto
tiempo nos da lecciones, esta vez fue un virus, que mata lentamente y de forma
silente…pero en otras ha sido un terremoto, un tsunami, un volcán, un maremoto…
y esos si dejan traumas mayores…
Entonces, para concluir mi
reflexión, dejo un simple resumen…
Cuidemos nuestra integridad
psicológica, mental y espiritual…
Cuidemos nuestras familias,
compartir más y mejores cosas…
Aprender a cuidar el tiempo,
buscando y negociando lo que necesitamos, eso es valido en todo el mundo, solo
hay que intentarlo y si no se puede con uno, buscar otro, el cambio de
mentalidad es básico en esto…
Pensar que la vida nos da
lecciones todo el tiempo y nos repite la prueba si no aprendemos cada lección,
la vida es la mejor escuela…y hay gente bruta que no quiere aprender a cambiar,
por eso viven de tragedia en tragedia, nunca salen de sus círculos viciosos…
Y Trascender…hacer algo útil por otros y por
nosotros mismos, sin que nadie lo sepa, y si lo saben, sentirlo con humildad…